Actividad prevista para el sábado, 5 de Octubre de 2.024.-
Después de este caluroso verano,
recuperamos nuestras actividades de senderismo con una ruta preciosa por
iniciativa de nuestro compañero Ángel Robles, que nos llevará de la aldea
yestera de Boche a Riópar. Inicialmente iba a ser de Yeste a Riópar, pero al
ser la primera después de unos meses sin actividades, hemos creído conveniente
quitarle unos kilómetros y empezar a andar en Boche. El recorrido de Yeste a
Boche corresponde al trazado de la séptima etapa del GR 68, Circular por la
Sierra del Segura, que va de Yeste a aldea de Las Quebradas, al pie del “balcón
de Pilatos”.
Así, comenzará nuestro recorrido en el
kilómetro 4 de la carretera AB 512 de Yeste a Tus por
Boche, pasada la aldea de Boche, donde parte un camino a mano izquierda. Es
ancho para permitir el paso a los bancales que nos flanquearán. Son pequeñas
parcelas sobre todo con olivos y almendros, que nos marcan el camino en el
primer kilómetro, hasta llegar a una pinada, a mano derecha, donde sale una
bifurcación también a mano derecha, que dejamos para seguir nuestro camino
adelante, por la izquierda. Vamos cuesta abajo, buscando el cauce del río Tus.
Dejamos la pinada y nos encañonamos más evidentemente siguiendo los arroyos que
alimentan al río. Al cabo de kilómetro y medio, el camino se estrecha y es
senda. En el kilómetro 1,8 cruzamos el cauce de un arroyo y subimos un poco,
después de unos 130m de descenso. Enseguida volvemos a bajar, con más pendiente
que antes. Encontramos un par de sendas que salen a mano derecha, que
dejaremos. Al fondo del barranco vemos el cauce del río y las ruinas del Molino
de los Alfaros. Después de un fuerte tramo de descenso, llegamos al puente del
Moropeche para cruzar el río Tus. Habremos caminado unos 3,4 kilómetros,
descendiendo unos 360 m, con un tramo de subida de 60 m.
Estamos al pie de la aldea de
Moropeche, de Yeste, en las faldas del molejón que lleva su nombre. Éste es una
singular meseta que forma parte del parque natural de los Calares del Mundo y
de la Sima. Y ahora, para continuar nuestra travesía, deberemos subir al Calar
del Mundo, remontando, desde cota 700, una subida de 900 m en unos 8 kilómetros
de camino, hasta cota 1.600 m.
Subimos a Moropeche por una senda, al
principio estrecha, entre carrascas, y luego entre parcelas agrícolas, más
ancha. Llegando a la aldea serpentea y es camino asfaltado, con algún tramo de
hormigón. Al cabo de algo más de un kilómero y unos 180 m de subida, alcanzamos
la carretera. Seguimos subiendo por ella para cruzar la aldea. La dejamos
subiendo por la calle Mayor y alcanzar un camino al Oeste, en la parte alta.
Seguiremos remontando nuestra cuesta
por este camino, que sirve para comunicar las parcelas de olivos y almendros
que ocupan terrazas en la falda Este del Molejón. En el kilómetro 5,9 de la
ruta, ya con 380 m de ascensión acumulada, en cota 1.000 m, nuestro camino
conecta con una amplia pista, por la que seguiremos subiendo 150 m más, durante
1,8 kilómetros, hasta llegar al arroyo de las Maderas, en cota 1100 m, donde la
dejaremos tomando una senda a la izquierda.
La senda sigue subiendo a través de
bosque de pinos y carrascas. A los 300 m, alcanzamos un camino más ancho, que
recorreremos kilómetro y medio más. En ese punto, después de cruzar el arroyo
del Puerto, en cota 1.380 m, ya con 820 m de ascensión acumulada, llegamos a la
fuente de Manjanares. Aquí hay otro camino que se une al nuestro por la
izquierda. Y un sendero, donde está la fuente, que sale a la izquierda, en
dirección al collado del Puerto, en la cuerda de Loma Pelada, que es límite de
la meseta del Calar del Mundo. Nosotros continuaremos por nuestro camino, por
la derecha, para remontar el arroyo del Puerto y llegar al otro collado que lo
separa del barranco del arroyo de la Marqueña, collado en el extremo de la
cuerda de Loma Pelada, y por donde entraremos en el Calar del Mundo. En el
collado, en cota 1.444 m, habremos recorrido 10,3 kilómetros, con 880 m de
ascensión acumulada.
Hasta aquí, bosque de pinos y
carrascas, con un buen camino, descarnado por la erosión, en algún tramo, pero
que nos facilitará la subida. Saltando el collado, todavía tenemos que subir
por la cuerda hasta cota 1.600 m, pero ya estamos en el Calar, y aunque nos
encontramos con algún árbol, es la piedra la que predomina en el paisaje.
Una vez alcanzada la cota máxima, a
algo más de un kilómetro del collado, iremos descendiendo por la ladera Oeste
de Loma Pelada sin senda clara y con muy poca vegetación. Deberemos prestar
atención a las piedras sueltas y lascas del terreno. Nuestro descenso tiene el
objetivo de cruzar el arroyo de Tus y alcanzar la senda del GR 66. El arroyo lo
encontraremos después de kilómetro y medio de bajada, en cota 1.460 m.
Cambiando de vertiente en el arroyo,
por fin llegamos a la senda del GR. El siguiente objetivo, tras pasar por la
fuente de los Tornajos, es alcanzar el collado del Argel, en cota 1.596 m,
saliendo del valle del arroyo de Tus, para entrar en la Cañada de las Yeguas. La
senda no tiene mal firme, aunque tampoco es bueno, pero las piedras sueltas y
el lapiaz calizo es lo normal en el Calar. Es cuestión de prestar atención al
caminar para evitar tropiezos o deslizamientos. En el collado del Argel
habremos recorrido 14,6 Km, con 1.200 m de ascensión acumulada.
Descendemos la cuerda del Argel para
llegar a la Cañada de las Yeguas y más allá, a 1,7 kilómetros, la fuente del
Espino, donde el sendero del GR 66 que seguimos continua por el camino más
ancho que recorre la meseta del Calar en esta zona. En este entorno
disfrutaremos de un paisaje magnífico. Seguiremos el camino, acompañados
siempre por las marcas blancas y rojas del GR, hacia el Norte. Poco a poco
vamos encontrando más arbolado hasta que el camino queda inmerso en un bosque
precioso de pinos, carrascas y quejigos. Iremos descendiendo poco a poco en un
paseo fantástico, y al cabo de kilómetro y medio encontramos una caseta, algo
destartalada, utilizada por los pastores como refugio eventual. Aquí termina el
camino y continua el sendero, siempre con marcas de GR, y el descenso se hace
más notable. El firme es bueno. Los montañeros transitan mucho esta zona. En la
caseta de los pastores estaremos en cota 1.400 m, más o menos, y vamos a
descender hasta cota 940 m para cruzar el río Mundo.
El descenso por el GR es realmente
espectacular, a través de un bosque sobre todo de carrascas, también con pinos,
y quejigos en la parte alta. El sendero está bien marcado. Encontraremos alguna
bifurcación hacia la derecha, que no tiene marcas de GR, y que, por tanto,
dejaremos. Como siempre, y aunque no encontraremos especiales dificultades, hay
que caminar con prudencia, pues encontraremos piedras sueltas, firme irregular
y multitud de raíces del arbolado.
Después de algo más de tres kilómetros,
y unos 460 m de descenso, llegamos al cauce del río Mundo. Siempre siguiendo
las marcas de GR, el sendero nos deja, cerca de la fuente de los Centenares, en
el camino que corre paralelo al río y que nos conduce al paso del puente de la
Viga, una construcción en el cauce del río para medir su caudal, y que nos
permite el paso fácilmente por los puntales de hormigón que jalonan el cauce.
En realidad, son cuatro pasos cortos.
Continuamos el recorrido del GR, ahora
por el trazado de la Cañada de Andalucía una vez cruzado el arroyo de
Roblellano, y después de algo más de un kilómetro de pista, llegaremos a la
carretera CM 3204, Riópar – Siles, que tendremos que recorrer durante unos 900
m, siempre por la izquierda y con prudencia, hasta llegar al casco urbano de
Riópar.
Habremos recorrido algo más de 22
kilómetros de ruta, con unos 1.100 m de desnivel acumulado.
La
actividad la clasificamos como de nivel III+, que supone
- Recorridos en Media Montaña.
- Recorridos con desniveles grandes que pueden superar ocasionalmente los 900 m.
- Rutas de larga duración, entre 6 y 8 h.
Este
tipo de rutas requieren experiencia en senderismo y buena condición física.
El
“plus” es consecuencia de combinación de la distancia y el desnivel acumulado,
sin que existan otras dificultades técnicas.
– oo O oo –
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