jueves, 31 de octubre de 2019

Mapa y perfil de la ruta: “Ascensión al Benicadell por la canal”


Actividad prevista para el próximo 9 de Noviembre de 2019
Vamos a visitar una sierra creo que desconocida para todos nosotros, pero que nos depara cantidad de sorpresas. Bajada considerable, subidas que te dejan sin aliento, caminos de herradura, maravillosas vistas y espectaculares bosques, en fin, lo justo para pasar un buen día de montaña.
La Sierra de Benicadell está vinculada a la figura del Cid, ya que este legendario caballero castellano fortificó un castillo árabe existente en las alturas de esta sierra en el año 1.092. El "Cantar del Mio Cid" cita estos bellos parajes con el nombre de Peña Cadiella, es una formación montañosa situada en la Sierra de Mariola entre la comarca del Valle de Albaida (provincia de Valencia) y la del Condado de Cocentaina (provincia de Alicante). Constituye una frontera natural de aproximadamente 25 km de suroeste a nordeste entre estas dos provincias.
Su punto culminante está a 1.104 metros de altura sobre el nivel del mar encontrándose rodeado de altos y verticales murallones a ambas vertientes, siendo uno de estos y más conocido el que llega a su cumbre desde el noroeste y denominado como la Cresta del Benicadell.
La Sierra del Benicadell, está muy ligada a la actividad montañera de esta Comunidad, se ha convertido en una montaña muy frecuentada, de hecho hasta muy andada la segunda mitad del siglo XX, se consideraba la ascensión al Benicadell, como un paso previo o un escalón más en el aprendizaje del oficio de montañero antes de poder visitar montañas más altas o más difíciles.
El itinerario:
Al llegar a Ráfol de Salem, aparcamos junto a la subida al Calvario de la Ermita de San Blas y  “el raco de vicent” donde podemos desayunar e hidratarnos a la vuelta.
Desde aquí, empezamos nuestra ruta subiendo por senda en ascenso, hasta llegar a la Ermita de San Blas construida en el año 1460, una vez allí por detrás de ella nos introducimos en senda por un primer tramo asfaltado en rojo y que enseguida pasa a ser de tierra dirección al Collado del Portet, nos adentramos, por un espeso y maduro bosque de pinos, blancos, rodenos y piñoneros, casi todos producto de las repoblaciones que se realizaron a inicios del siglo XX. Nos encontramos en uno de los mayores tesoros de las montañas valencianas, un magnífico paraje.
El bosque se vuelve más y más espeso, todo un regalo para nuestra vista si tenemos en cuenta que la totalidad de la sierra fue arrasada por un incendio en 1994.
Al llegar al primer indicador tomamos dirección “las fontetes”/“casas de les Planisses” y más adelante tomaremos dirección “las fontetes”, (siendo este punto donde nos uniremos cuando volvamos, a partir de aquí será el mismo camino hasta Ráfol de Salem), haciendo caso omiso a la señal que nos indica “cima del Benicadell”, tendremos tiempo de tomarla más adelante.
Poco antes de llegar al paraje de “las fontetes” por senda de herradura en buen estado y con unas esplendidas vistas de la umbría del Benicadell, ya divisamos su espectacular mole y la vertiente por la que regresaremos. (paraje natural de recreo con una fuente de la que sale un pequeño chorro de agua y algunas mesas)
Desde aquí y siempre llevando la contraria a la señalización obviamos de nuevo el indicador “cima del Benicadell”, tomando una senda a la izquierda en ascenso que nos lleva hasta la “casas de les Planisses”, o casa del Guarda (715 m), antigua casa de vigilancia forestal alrededor de la cual se han instalado mesas y bancos de madera. Es un antiguo edificio tradicional del que disfrutamos de magníficas vistas de la Vall d'Albaida, es utilizada durante gran parte del año como punto de vigilancia forestal. Hasta aquí se puede llegar en coche.
Desde aquí también tenemos una estupenda panorámica Seguiremos por la pista, pasando por una barrera que impide el paso de vehículos, por donde en algún recodo nos permite ver la cara norte de esta sierra, con su vértice claramente perceptible y paredones aparentemente inexpugnables.
Poco más adelante encontramos otro panel informativo indicando la dirección a la cima del Benicadell, y como es natural pasamos del mismo y tomando el camino de la izquierda en ascenso llegamos al “Collado de la Cova” (795 m.).
A partir de ahora empieza lo bueno, antes de descender podemos ver un pequeño panel de madera que en su día indicaba como llegar al mirador de les Marjaletes pero ahora tan solo es un panel de madera sin más, desde dicho mirador en un estado un tanto lamentable tenemos unas hermosas vistas de la población de Beniarrés y su pantano.
Por una estrecha senda y en fuerte descenso vamos bajando por terreno bastante resbaladizo tanto por lo que es la tierra suelta, como por la pedrera por la que cruza, hay algún tramo de destrepe en el que nos ayudamos con un cable de acero forrado de plástico que más adelante en algún otro tramo está roto. Durante el próximo km. debemos bajar casi 200m. una faena teniendo en cuenta que al llegar al fondo tenemos una interesante subida.
Durante todo el recorrido de esta senda que bordea la sierra del Benicadell, debemos prestar toda nuestra atención ya que en algunos tramos se encuentra bastante deteriorada y en otros casi desaparecida, hay que recordar que vamos descendiendo un barranco. Cuando llegamos a la parte más baja tenemos un fuerte giro a la derecha encontrándonos de cara la famosa, y durilla Canal del Benicadell.
El total de la canal está compuesta de tres ascensos, en cada collado vamos a disponer de imponentes panorámicas de la zona y sierras colindantes de la parte Alicantina.
Comenzamos un ascenso a más de 1100 metros desde poco más de 600 metros de altura. 500 metros de desnivel del tirón y en poco más de un  kilómetro, la pendiente de esta pedrera no tiene nada que envidiar en desnivel a la del Puig campana y si me apuráis a alguna que hemos hecho por pirineos
Nos tomaremos con calma el ascenso y subiremos poco a poco con cuidado sobre una pedrera que cada vez se intensifica más y aunque luego veremos que este es el ascenso más complicado: “Pa los del sierra nà”.
Las piedras están muy sueltas y hay veces que pisas y te vas hacia detrás, por lo tanto el esfuerzo es doble,
Acabada la primera parte de la subida y al llegar al rellano existente, nos merecemos un buen descanso, tenemos que destensionarnos de la bajada, recuperar el resuello de esta subida y coger fuerzas para el siguiente tramo que desde aquí visualizamos y “acojona”, solo hemos subido el primer tramo nos quedan dos más.
Tenemos increíbles vistas de la sierra Mariola con los picos Montcabrer y Tejo. Desde aquí se puede contemplar también el valle del río Serpis, con el embalse de Beniarrés y por detrás las sierras de la Almudaina, Alfaro, Serrella y Aitana, entre otras.
Seguimos adelante y enseguida volvemos a entrar en materia introduciéndonos de nuevo en una pedrera como la de antes, aunque yo creo que con mayor desnivel “o me lo hace ver el esfuerzo anterior”, pero lo único que tenemos que hacer es seguir subiendo y ganando altura: “Somos del sierra”.
Una vez superado este segundo tramo el tercero ya no ofrece ninguna dificultad ya que empieza con un ligera bajada y nada que ver el ascenso con los anteriores, eso sí cuando lleguemos arriba habremos comprobado como esta nuestro estado físico.
Poco antes de llegar a la cresta final de la cumbre del Benicadell nos encontraremos un pequeño rellano, donde hay una higuera y un antiguo pozo “el Pou del Benicadell“, restaurado y cerrado para evitar caídas.
Desde aquí, afrontamos el tramo final, estrecho, empinado y rocoso, donde debemos crestear alrededor de 25 m. para llegar al vértice geodésico poco aconsejable para gente con vértigo, al ser el tramo más peligroso y aéreo del recorrido.
Las vistas son por una parte el Embalse de Beniarres, por la otra el Embalse de Bellús, por una parte, el Montcabrer, por la otra el Aitana, todo ello acampanado por el gran Valle d'Albaida, una pasada.
Desde aquí cogemos “la senda típica de ascenso a este pico que nada tiene que ver con la que hemos hecho” aunque las vistas siguen siendo magnificas. Llegamos al punto que nos indica la Nevera del Benicadell y nos desviamos para verla.
La nevera del Benicadell, se sitúa a 1025 metros de altura, en el punto conocido como Alto de la Nevera, en el oeste de la cima del Benicadell y en la misma cresta, justo en la línea divisoria de los términos municipales de Beniatjar y Gaianes, y al mismo tiempo de las provincias de Valencia y Alicante. El diámetro de la cava o pozo de nieve es de 10,20 metros y su profundidad de 7,90 mts, teniendo una capacidad de 640 m3, y permanece en relativo buen estado con un techo y ventanas enrejadas, rodeadas por plantas trepadoras,
Desde la nevera volvemos sobre nuestros pasos al desvío anterior y empezamos a bajar por una bonita y estrecha senda que recorre una zona de umbría con mucha vegetación, hasta enlazar con un tramo de pista que nos llevará a la “casas de les Planisses”. Desde aquí en lugar de volver por “Les Fontetes” por donde ascendimos, seguiremos dirección “Rafol de Salem” donde llegaremos en continua bajada por amplio camino y senda hasta coincidir los últimos 2 kms. con el camino que tomamos al inicio de la ruta.
En total, el recorrido supone unos 18 km, con unos 1.000m de ascensiónacumulada.
La actividad la catalogamos como de nivel III+, por la pendiente y lo dificultoso de la progresión, que van algo más allá que una actividad propiamente de senderismo, y que supone:
·         Recorridos en Media Montaña
·         Recorridos con desniveles grandes que pueden superar ocasionalmente los 900 m.
·         Rutas de larga duración, entre 6 y 8 h.
Este tipo de rutas requieren experiencia en senderismo y buena condición física.
Antonio Barrios.